Dos grandes temas que hoy se disputa en Brasil.

La política comercial de la Argentina en los últimos años se fue modificando y pese a que Brasil es el principal socio, la relación con China y Rusia se incrementó exponencialmente. En los últimos 12 años el intercambio comercial con Brasil creció 297% y sigue liderando con montos superiores a los u$s 30.000 millones por año. Sin embargo, el crecimiento de China fue de 900% y con Rusia de 830%.

En cambio, el volumen del intercambio comercial (exportaciones más importaciones) entre la Argentina y China se incrementó desde US$ 1.400 millones en 2002 a US$ 17.000 millones en 2011, aunque se ha estancado en el último trienio. Por su parte, el intercambio comercial entre la Argentina y Rusia pasó de solo US$ 230 millones en 2002 a US$ 2.500 millones en 2013, según datos de la consultora Finsoport.

“Desde el punto de la obtención de divisas, los intercambios comerciales con China y con Rusia han sido deficitarios en los últimos años, por lo que una profundización de esos vínculos incluso podría acentuar ambos resultados negativos”, destacó Jorge Todesca en diálogo con Cronista.com.

Este crecimiento exponencial de China y Rusia en el intercambio comercial se contrasta con la ralentización de Brasil. Desde su máximo en 2011 con u$s 39.143 millones se pasó a 2014 a apenas u$s 29.263 millones. Desde 2002 hasta 2007 el crecimiento del intercambio con el país vecino fue ascendente y constante, pero en 2008 mostró su primera baja en medio de la crisis internacional. Ya para 2009 los valores se recuperaron hasta 2011 que alcanzó su máximo.

Para los próximos años no se espera una recuperación e incluso los analistas creen que habrá un “nuevo declive en el intercambio comercial con Brasil en 2015 debido al estancamiento de la economía, el deterioro del tipo de cambio bilateral y el declive de la actividad en Argentina”.

El sector más afectado por el declive con Brasil es la industria automotriz que concretó envíos por u$s 6.900 millones durante 2014. En segundo orden aparecen los sectores del plástico y químicos, cereales, productos de molienda, maquinaria en general y combustibles.

Por otra parte, en la relación con China, pese a que el intercambio comercial se incrementó, las principales exportaciones argentinas a ese país son soja con un 65% seguido por otros productos con un 12%, Petróleo y derivados 7% y aceite de soja con un 7%.

A su vez “en lo que respecta a las importaciones argentinas de China en 2014 se trató de bienes principalmente de origen industrial, que abarcaron rubros diversos como telefonía celular, materias ferroviario y maquinaria”, sostiene Todesca.

En el caso de Rusia la relación comercial se asocia principalmente a productos agroindustriales como lácteos, carnes, pera, cítricos, maníes, manzanas y ciruelas. En cambio las importaciones argentinas provenientes de Rusia comprendieron bienes primeros en 2014 como petróleo y sus derivados, abarcando un 78% de las compras totales.

“El aumento del intercambio comercial con Rusia representa un mejor panorama que la relación con China, en la medida en que, si bien no permite colocar importantes cantidades de manufacturas de origen industrial, comprende la adquisición de productos que no compiten con la industria local”, finalizó el economista de la colusora Finsoport.

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  El Banco Central de Brasil subió el dia 29/04 la tasa de interés referencial a un 13,25% desde un 12,75%, como se esperaba, y así mantuvo su agresivo programa de endurecimiento monetario para controlar la inflación y recobrar la confianza de los inversores. Se trata del mayor valor nivel desde enero de 2009.El comité de política monetaria, conocido como Copom, votó de forma unánime elevar la tasa Selic en 50 puntos básicos por quinta oportunidad consecutiva. La decisión era esperada por la mayoría de los economistas y operadores.  El real se depreció ayer 0,8% a 2,9613 por dólar. Lleva 25% en el último año. "El banco central está mirando una economía que se desacelera fuertemente, pero con una inflación que permanecerá alta en 2016", dijo Roberto Padovani, economista de Votorantim. "En el corto plazo hay necesidad de focalizarse en la inflación", agregó. La meta de inflación del gobierno es 4,5%, más o menos 2 puntos. Pero la inflación subió a 8,22% en abril desde 7,9% el mes anterior, el mayor avance anual en más de una década. "Tienen un largo camino por delante en el lado fiscal, pero podemos decir que están yendo en la dirección correcta", dijo Thais Zara, economista de Rosenberg Consultores. "El banco central necesita seguir subiendo las tasas para recuperar la credibilidad que se perdió en los años recientes por el fracaso de llevar a la inflación a su meta central", agregó Newton Rosa, economista de Sul America Investimentos. En un intento por recuperar la confianza de los inversores, el gobierno prometió mejorar las cuentas fiscales. Así Brasil no perdió la calificación de "investment grade".